Analistas, periodistas y expertos en política han manifestado en diversas ocasiones que la elección del estado de México será el preludio más evidente de la batalla presidencial de 2012. A lo largo de estas semanas de campaña, se ha podido ver cómo se encuentra cada partido político y para dónde se perfila la guerra electoral venidera del próximo año. El desempeño de los candidatos de los tres principales institutos políticos que se disputan la gubernatura, es el resultado de una cultura partidista sumamente desprestigiada por la ineptitud de sus representantes al llegar al poder.
A lo largo de 24 días Alejandro Encinas, Eruviel Ávila y Luis Felipe Bravo Mena; han manifestado posturas y discursos que en el papel no distan unas de otras; sus propuestas de gobierno son lugares comunes, propuestas desgastadas y en su mayoría rayan en la demagogia de la coyuntura electoral. Sin embargo si se ha escuchado toda clase de descalificaciones y de golpeteos de diversa índole, que trasciende el terreno local. En el caso del perredismo el discurso del ex jefe de gobierno capitalino se ha centrado en denostar al priismo represor de Atlacomulco y su claque consanguínea que ha gobernado la entidad.
La propuesta discursiva de Encinas revela un vacío en su contenido y en el cómo, y es que el candidato de izquierda no le ha explicado al electorado, que en caso de llegar al poder ejecutivo local, cómo acabará con las corruptelas del Grupo Atlacomulco y su clan de poder dentro del PRI. Por otro lado es notoria la ausencia de los cuadros políticos del perredismo en su campaña, y es que no todas las corrientes del partido acompañan a su candidato por la gubernatura, dejando en claro que las divisiones y los intereses pueden más que plantear una plataforma política común de gobierno que sea competitiva y atractiva para las mayorías, reflejando su divisionismo a nivel nacional.
Por su parte el candidato oficialista, es presa de las cúpulas de poder dentro de su partido, y es que es importante recordar que éste no llegó siendo el favorito del gobernador, pues su ahora campaña fue diseñada para Alfredo del Mazo Maza, la cual fue adaptada por los asesores de imagen del actual gobernador. La campaña de Ávila ha sido el reflejo de lo que representa Enrique Peña Nieto, un político construido a base de dinero y de mercadotecnia política, dejando en claro que el abanderado del PRI debe seguir el mismo libreto que el posible candidato a la presidencia.
Eruviel y el denominado nuevo PRI, en 24 días han invertido millones en la campaña para comprar líderes sociales, líderes perredistas de diversos municipios. El priismo local, no dudó al reclutar a líderes corruptos del PRD como Víctor Hugo Círigo y René Arce para mover votos a su favor. Asimismo Eruviel Ávila, manifestó que quien le llevara más votos a las urnas serían premiados con cargos públicos y automóviles del año, revelando el poder económico y la poca ética política del candidato y su partido. Por si fuera poco el PRI no dudó en aliarse a la cacique magisterial Elba Esther Gordillo, quien moverá a 75 mil profesores adscritos al SNTE para operar a su favor.
Del lado del PAN, el dejar a su candidato a su suerte y que los liderazgos locales y nacionales no lo apoyaran, es el reflejo de la descomposición que vive Acción Nacional. Dejar naufragar al partido en el estado de México, ha traído consigo mismo actos de desesperación que revelan el poco oficio político del partido gobernante; en este tenor la detención de Jorge Hank Rhon, priista mexiquense que radica en Tijuana, revela que el gobierno panista pretende ganar elecciones por golpes mediáticos para desprestigiar a sus adversarios, sin embargo no hay que perder de vista que estas estrategias han sido fallidas como el caso del michoacanazo.
Además de estos factores, Luis Felipe Bravo Mena, ha sido un candidato que se ha dedicado a denostar a sus contrincantes, con un discurso en el que la población no cree, en buena medida porque representa a un partido político que en casi 12 años ha dilapidado la economía, la seguridad nacional, la salud pública y la democracia.
Los tres candidatos y sus partidos son el reflejo de lo peor de la política y de lo que representa el poder, dejando en claro que no existe una visión integral de gobierno. La forma en la que se lleva la campaña en el estado de México basada en golpes y descalificaciones, es una muestra mínima de lo que vendrá en el 2012, con base en los referentes inmediatos, la campaña presidencial será un cúmulo de golpes al interior y exterior de los partidos, además el uso del poder del estado como método de intimidación será preponderante, así como también atestiguaremos enormes traiciones al interior de los institutos políticos, evidenciando que la clase gobernante y partidista, aprendió lo peor del 2006.
DESDE LA REDACCIÓN, el PRD michoacano debe encender los focos rojos, pues todo parece indicar que en noviembre el PRI regresará de la mano del ex edil de Morelia Fausto Vallejo, la pregunta surge ¿Qué harán los Cárdenas para no perder su único bastión de poder?
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luisdiazluna 
Muy interesante abordaje de la situación eletoral en el estado de México, creo que lo que destaca en esta lid es la corrupción y el abuso de poder económico y mediático, para imponer la continuidad política en el Estado. Por otra parte no hay que perder de vista que de los tres candidatos dos (Bravo Mena y Ávila) representan la certeza de continuidmo depredador, y el tercero solo una posibilidad de cambio a un sistema también de continuismo pero acaso mas humanizado. En esta camapña los candidatos hablan todos los días, solo la ciudadanía no se ha expresado,¡ urge que lo haga!
José Luis Díaz Ortega
Muy buen artículo, me agradó el tono y la forma en la que abordas el tema sobre la corrupción el abuso que existe en todos los partidos y candidatos. Que bueno que muestres la información tal y como es, sin tomar una línea política, sino mostrando simplemente la verdad. Esto sólo reafirma mi posición sobre los comicios, y me ayuda a mantenerme en la postura de anular mi voto como una forma de rechazo al sistema político mexicano.
Agradezco tus comentarios, este espacio de análisis busca ser plural en sus entregas y mostrar lo que ocurre procurando siemrpre evitar tomar una postura ideológica, próximamento hab´ra todo una análisis de lo que ocurre en Michoacán.
OK
Excelente análisis del panorama electoral que se avecina en las elecciones presidenciales del 2012. Habría que cuestionarnos ¿cuantas de todas estas estrategias de corruptela electoral son nuevas? Uno de los problemas del sistema político mexicano es la multiplicidad de partidos, pues de esta forma es más fácil moverse entre las tendencias ideológicas, y ser, como lo amerite la ocasión, de izquierda, centro, derecha o sus combinaciones posibles. La falta de compromiso ideológico de los partidos políticos nos han dado como resultado ésta clase de gobernantes, producto también de un electorado que no se quiere comprometer en la búsqueda de otras opciones de participación política. Al final no importará quien llegue a los diferentes cargos de “elección popular”, pues nuestra partidocracia ha llegado a un punto tal en que sólo importa el poder por el poder mismo.